La dureza de la hojalata está relacionada con el proceso de recocido y el acero base utilizado en su fabricación. El recocido es un proceso térmico que se aplica al acero para ablandarlo y mejorar su ductilidad. A medida que el acero se recuece, su dureza disminuye y su capacidad para ser embutido y conformado aumenta.
En general, las hojalatas se clasifican en dos tipos según su dureza: simple reducida y doble reducida. La hojalata simple reducida tiene una menor dureza que la doble reducida.
La dureza de la hojalata se mide en la escala Rockwell HR 30T y se designa con una letra «T» seguida de un número de dos cifras. Por ejemplo:
- T50: 45-52 (blando para embutir, como golletes y vertederos)
- T52: 48-56 (embutición moderada, como cierres a fricción)
- T57: 54-61 (uso general, como tapas y tapón corona)
- T61: 57-65 (uso general de más dureza, como tapas y cuerpos)
- T65: 61-69 (duro, poco usado)
- T70: 66-73 (muy duro, poco usado)
En el caso de la hojalata doble reducida, se utiliza un código diferente que incluye las letras «DR» seguidas de un número que indica el límite elástico en N/mm² o psi.
En resumen, el recocido influye en la dureza de la hojalata, y a medida que aumenta el recocido, la dureza disminuye y la ductilidad aumenta. La dureza adecuada de la hojalata dependerá de la aplicación específica y los requisitos de conformado.
Es una forma excelente para conocer mejor los diferentes temas que se exponen aqui.
Tengo experiencia en el uso de la hojalata de reducido sencillo vs hojalata de reducido doble, los fabricantes de envases conocieran mejor este significado pensaria que harian el cambio a la hojalata de doble reducido ya que se pueden usar espesores mas delgados, asi yo cambie de 0.22 a 0.17 mm con resultados excelentes.