Las características más importantes a tener en cuenta en el diseño de una lata de conservas son:

  1. Hermeticidad: Es esencial que el envase sea completamente hermético para proteger el producto y evitar el contacto con el aire, oxígeno o bacterias que puedan contaminarlo.
  2. Protección contra la luz: Los envases metálicos ofrecen la ventaja de ser opacos, lo cual impide que la luz afecte negativamente las cualidades del producto, especialmente las vitaminas.
  3. Inviolabilidad: Los envases deben ser inviolables para ofrecer una garantía sólida a los consumidores, especialmente en el caso de las conservas de pescados y mariscos que requieren altas temperaturas durante su procesamiento.
  4. Trazabilidad: Debe existir la posibilidad de identificar en todo momento el origen del producto envasado.
  5. Conservación sin refrigeración: Los envases deben permitir el almacenamiento del producto sin necesidad de congelación o refrigeración, manteniendo así las cualidades nutritivas.
  6. Durabilidad: Los envases deben ser resistentes y duraderos, capaces de mantenerse sellados herméticamente bajo condiciones normales de operación y logística comercial para evitar la recontaminación microbiológica.
  7. Resistencia a la corrosión y daños mecánicos: Deben ser capaces de resistir la corrosión y posibles daños mecánicos, así como las agresiones térmicas y mecánicas durante el procesamiento y almacenamiento.
  8. Facilidad de apertura: Es importante que la lata pueda abrirse fácilmente sin dañar el contenido, preservando la apariencia del producto.
  9. Diseño de la etiqueta y presentación: El diseño de la etiqueta y las envolturas o empaques deben ser atractivos y funcionales, adaptándose a las necesidades de marketing y presentación del producto.
  10. Adecuación al llenado mecánico: Para ciertos productos, es más racional utilizar envases cilíndricos que son más adecuados para el llenado mecánico y en los cuales el factor apariencia es menos importante.

Estas características aseguran que el producto envasado se mantenga en condiciones óptimas para el consumo, al mismo tiempo que cumplen con los requisitos de seguridad alimentaria y las expectativas de los consumidores.