Para comprobar la costura en un envase de metal, siga estos pasos:
- Examen visual: Realice un cuidadoso examen visual de todo el envase, prestando especial atención a las costuras. Busque defectos como aristas, abolladuras, depresiones del borde, picos, pliegues, pestañas salientes y defectos de solapado. También esté atento a otros defectos menos perceptibles, como defectos en la hojalata o pequeños orificios en la soldadura de las costuras laterales.
- Determinar el origen de los defectos: Durante el examen visual, trate de determinar si los defectos se deben a daños causados durante el transporte o si se produjeron en el establecimiento de elaboración. Registre todas las observaciones.
- Marcar y registrar los defectos: Es importante localizar los defectos del envase, marcarlos y registrarlos para llevar un control adecuado de la calidad.
- Mediciones no destructivas: Realice mediciones no destructivas de las costuras o cierres utilizando herramientas específicas, como un micrómetro o un calibrador de costuras. Estas mediciones pueden incluir el espesor de la costura, la anchura de la costura, la altura del cierre, la superposición y la presión de la costura.
- Análisis destructivo: Si es necesario, realice un análisis destructivo de las costuras abriendo el envase y examinando la integridad de la costura interna. Esto puede revelar problemas que no se detectaron durante las inspecciones visuales y las mediciones no destructivas.
Recuerde seguir siempre las especificaciones y tolerancias establecidas por el fabricante del envase y las normativas aplicables en su país o región.
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