ML-En 1986 nace en Molina de Segura Autorema, en una época donde el sector gozaba de una excelente salud. Con más de 30 años de experiencia, actualmente seguís siendo un referente en el sector. ¿Cómo recordáis esos inicios?

Por aquel entonces yo no había ni nacido, así que va a ser difícil contestar a esta pregunta, pero sí que he tenido oportunidad de escuchar de boca de mi padre y de sus socios, como lo vivieron ellos. Según cuentan, era una época donde había mucho trabajo a nivel local (desde Murcia se exportaba gran parte de las conservas que se consumían en Europa por aquel entonces), pero también había mucha competencia. Ese clima permitió que desarrolláramos muchas soluciones para el sector del envase metálico, y que creciéramos bastante rápido, pero al mismo tiempo, nos obligaba a ser muy exigentes con nuestro trabajo, para no decepcionar a nuestros clientes. Ese compromiso con la calidad, tan arraigado en nuestro ADN, lo hemos mantenido hasta hoy.

ML-¿Cómo ha sido esa evolución a lo largo de estos años?, ¿en qué ha cambiado Autorema, como empresa, hasta llegar a la actualidad?

Siempre hemos procurado tener una visión enfocada al exterior de la empresa, sin perder de vista lo que ocurría dentro, y eso nos ha permitido estar actualizados ante la sociedad que nos rodeaba en cada momento. En los años 90 supimos darnos cuenta de que el mercado era algo global y con la ayuda de internet, una maleta y un teléfono móvil salimos a recorrer el mundo.

Poco a poco, el equipo fue creciendo y decidimos dar un impulso a la ingeniería. Hoy en día contamos con más de 10 ingenieros y con una inversión constante en I+D+i. Más adelante, fue la llegada de la robótica industrial y entonces decidimos crear un departamento de automática y formar un equipo de programadores y especialistas que ya cuenta con más de 10 personas.

En la actualidad, nos encontramos enfocados en apoyarnos en la industria 4.0 y en todas las herramientas que nos puede proporcionar, para tratar de ayudar a nuestros clientes, mediante la robótica colaborativa, el internet de las cosas, el gemelo digital, etc.

ML-Vuestra compañía se dedicada a la automatización de procesos de alta producción, el desarrollo de proyectos integrales ´llave en mano´ en todo el mundo. ¿La automatización y las nuevas tecnologías son vuestra pieza clave?

Absolutamente. En un mundo cada vez más competitivo, creo que la automatización juega un papel muy importante para optimizar los procesos de nuestros clientes. Además, creo que la automatización reporta muchos beneficios que la mayoría de las veces pasan desapercibidos, como por ejemplo, la estandarización de la calidad, la mejora en la localización de errores, la reducción de errores humanos, etc. Siempre, sin perder de vista el componente humano de las empresas. Creemos en la automatización, pero estamos más convencidos todavía de que las empresas avanzan gracias a las personas. Nuestra apuesta es permitir que esas personas desarrollen tareas que realmente sean valiosas para la corporación.

ML-Las soluciones de ingeniería de Autorema tienen su principal activo en las industrias del envase metálico y la conserva. ¿Qué otros ámbitos de especialización ofrecéis?

Como he comentado anteriormente, hoy en día disponemos de un equipo bastante grande (somos ya más de 70 personas) y muy preparado. Eso nos permite, a veces, desarrollar proyectos de automatización y robótica para otros sectores como pueden ser el farmacéutico, el sector del vidrio, o el del cartón por ejemplo. Aunque, a día de hoy, más del 80% de nuestro negocio está enfocado al envase metálico.

ML-Vuestra compañía se ha labrado un nombre por sí misma de la mano de una red de fabricantes de lata que os permiten testar nuevas soluciones de automatización con las que destacar en el marco internacional. ¿En qué países?

En América Latina es donde tenemos mayor presencia. Podemos decir que tenemos proyectos en todos los países del cono sur. Allí fue donde antes empezamos a divulgar, sobre todo por tener un mismo idioma y una cultura muy parecida. Sin embargo, en los últimos 10 años, hemos potenciado mucho el mercado europeo y el africano, y ya casi alcanzan al sudamericano. Ahora mismo, estamos tratando de potenciar también el mercado estadounidense y del medio oriente.

ML-Autorema sigue siendo una empresa familiar en la que el relevo generacional está asegurado y que confirma la fortaleza y expansión de la compañía internacionalmente. ¿Cuál es el secreto de vuestro éxito?, ¿qué importancia tiene el cliente dentro del proceso productivo?

Digamos que las generaciones precedentes, se han encargado de inculcar la cultura del esfuerzo y del sacrificio. Hay un mantra que se repite mucho dentro de la empresa, y es que

«somos una empresa de servicios». La verdad es que no hacemos distinción entre clientes. Procuramos dedicarle la misma energía a todos. Eso requiere de una infraestructura capaz, pero pensamos que lo estamos logrando.

ML-¿Latinoamérica ha sido clave para ese crecimiento?

Latinoamérica ha marcado un antes y un después para nosotros. Fue donde empezamos a exportar, y cuando exportas tienes que cumplir con unos mínimos de calidad. Nuestra idea de negocio es establecer una relación duradera con el cliente. Nos gusta ser un proveedor estratégico, en el que los clientes se apoyan y con el que consultan cualquier aspecto relacionado con la automatización de su proceso productivo (incluso aunque, a veces, todo se quede en estudios y planteamientos que no nos reportan ninguna venta). Conseguir eso en un mercado tan exigente como es el mercado latinoamericano nos obliga a mantener un estándar de calidad muy alto.

ML-¿La integración de robots para diversas aplicaciones y control de calidad a través de la incorporación de tecnologías avanzadas, como el campo de la visión artificial, seguirá siendo vuestra apuesta a futuro?

Por supuesto. La robótica está viviendo una segunda juventud. La democratización de los robots está permitiendo que hoy en día se puedan aplicar soluciones robotizadas para pequeños fabricantes que antes era impensable imaginar. Ciertamente, la mayor ventaja que ofrece un robot es la robustez del sistema. Están pensados para trabajar a niveles de exigencia muy altos y ofrecen una flexibilidad muy grande.

ML-Vuestra empresa fabrica máquinas personalizadas para los sectores de la lata y la conserva, y exporta el 70% de su producción a cuatro continentes. ¿Qué expectativas de crecimiento tenéis a corto, medio y largo plazo?

Queremos seguir conservando nuestra seña de identidad, de ofrecer soluciones personalizadas para cada cliente, pero mediante procesos estandarizados. Es decir, solucionar los problemas de nuestros clientes con métodos altamente probados, pero adaptándonos a lo que necesitan en cada momento.

A corto plazo, queremos seguir aumentando nuestra cifra de negocio. Este año esperamos crecer casi un 30% respecto al año anterior. A medio plazo, entre nuestros planes está el de reforzar nuestra presencia física en algunos mercados estratégicos, como por ejemplo es el caso de Mexico, donde tuvimos oportunidad de vernos en la exhibición Latamcan el mes pasado. A largo plazo, siempre es más difícil hacer planes, en una sociedad tan cambiante como la de ahora. De momento, nos conformamos con que nuestros clientes sigan confiando en nosotros y nos vean como un apoyo estratégico para el crecimiento de su empresa.

ML-Habéis estado presente recientemente en Latamcan 2021, ¿qué balance hacéis de vuestra asistencia en esta importante feria internacional?

El balance siempre es positivo. Y más en esta época que nos está tocando vivir. Siempre es bueno volver a recuperar el contacto humano que llevábamos varios años perdiendo, a causa de la pandemia que hemos sufrido y que seguimos sufriendo. Creo que ahora más que nunca, eventos como la Latamcan se hacen necesarios, para potenciar esas relaciones interpersonales que considero tan importantes y que pienso que la pandemia ha deteriorado. No niego que la pandemia ha aportado cosas buenas e interesantes, como el teletrabajo o las videoconferencias, pero creo que no podemos permitirnos deshumanizar nuestras relaciones, porque estaríamos poniendo en peligro lo que nos constituye como sociedad.

ML-La reciente subida de precios de las materias primas, el encarecimiento del transporte marítimo y la crisis energética. ¿Os podría afectar de alguna manera?

De hecho, ya nos lleva afectando desde hace meses. Nosotros lo vemos sobre todo en la subida del precio del acero, así como en la falta de componentes electrónicos. Por suerte o por desgracia, es un problema global que nos está afectando a todos. En lo que a nosotros nos compete, estamos tratando de mitigar los daños con una política de aprovisionamiento adecuada, al igual que estamos tratando de no repercutir esas subidas a nuestros clientes. El resto, es competencia de los gobiernos, los cuales entiendo que estarán tratando de buscar soluciones.

ML-Para concluir la entrevista, ¿qué balance hacéis de este último año?, ¿hay optimismo?, ¿qué nuevos nichos de mercado se os presentan?

Por lo general, tanto este año, como el anterior, han sido años de mucha incertidumbre. Los cierres de fronteras nos han puesto la situación muy complicada en muchos momentos. Aún así, en Autorema hemos seguido creciendo a buen ritmo. La industria del envase metálico no ha sido de los sectores más golpeados por esta crisis. Así que nuestro objetivo sigue siendo expandir nuestro mercado dentro del sector del envase metálico y potenciar ciertas ramas como es la industria del envase de dos piezas para bebidas.

Personalmente soy optimista. Siempre trato de ver las crisis como una oportunidad, y en esta ocasión tenemos la oportunidad de volver a poner en valor a las personas y al mismo tiempo utilizar las nuevas tecnologías que se nos presentan para crear lazos y acortar distancias. Tenemos la oportunidad de tratar de hacer nuestros procesos más eficientes, de seguir políticas corporativas más responsables, etc. En definitiva, creo que las crisis son siempre un aviso a navegantes, que debemos de saber interpretar, para mejorar como individuos y como corporación.