La británica Small Beer, una cervecería con sede en Londres acaba de lanzar su primer envase de 330 ml para las tres cervezas principales que produce. «Todos los factores de la producción y el consumo afectan al medio ambiente, y las latas se toleran mejor que las botellas en términos generales», confirma el cofundador de la cervecería, Felix James. «Las latas son respetuosas con el planeta porque proporcionan una calidad excepcional pese a que la producción es más sencilla”, añade.
“Las latas son un poco más livianas que las botellas, tienen más volumen y se apilan ordenadamente en las estanterías para un transporte eficiente. La flexibilidad de latas significa que es mucho menos probable que se dañen durante el transporte, lo que ayuda a reducir el desperdicio en un entorno electrónico optimizado por venta”, destaca James.
Recientemente, la marca ya había logrado un aumento de ventas después del lanzamiento de porciones en latas, y con la nueva iniciativa se ve claramente que más personas podrán disfrutar de los productos. Small Beer’s continuará embotellando y embarrilando sus cinco cervezas principales, al igual que ahora pueden comprarlas en línea.
James añade que “a pesar de contener más cerveza que una botella típica de cuello largo de 330 ml, nuestras botellas pequeñas son 20% más livianas y sus cuellos cortos permiten que quepa 40% más de cerveza en un palé, lo que reduce aún más nuestra huella de carbono en comparación con otras. Debido a que las tasas de reciclaje en el Reino Unido continúan mejorando y el crecimiento de la demanda se asienta, esperamos llegar a un momento en que existencias de aluminio reciclado superan al mercado, momento en el cual probablemente el argumento se inclinará hacia los envases pequeños”.