La resistencia axial de un envase es la capacidad que tiene este para soportar cargas verticales sin sufrir deformaciones permanentes en su altura. En otras palabras, es la cantidad mínima de peso que un envase puede soportar sin rehundirse.

La resistencia axial se valora en función del eje del cilindro del envase, es decir, en la dirección de la altura del envase, y determina los esfuerzos que este debe soportar durante los procesos de almacenamiento y transporte. Es un factor importante a considerar en la fabricación de envases, ya que una resistencia axial insuficiente puede provocar deformaciones o roturas en el envase, lo que puede afectar la calidad y seguridad del producto envasado.

La resistencia axial de un envase depende de varios factores, como el espesor del material utilizado en su fabricación, las características mecánicas del acero, el diseño del cuerpo del envase y la presencia de abordando (un reborde que se utiliza para mejorar la resistencia radial del envase). Existen equipos comerciales que se utilizan para medir la resistencia axial de los envases, y los valores pueden variar en función del diámetro del envase y del tipo de material utilizado.

En resumen, la resistencia axial es una propiedad importante de los envases metálicos que se utiliza para evaluar su capacidad para soportar cargas verticales y evitar deformaciones o roturas durante los procesos de almacenamiento y transporte.