La Asociación de Aluminio y el Instituto de Fabricantes de Latas (CMI) han publicado un informe actualizado de indicadores clave de rendimiento con el que respalda los nuevos objetivos de tasa de reciclaje de latas. Dicho informe que lleva por título, ‘La ventaja de las latas de aluminio: Indicadores clave de rendimiento de sostenibilidad 2021’ recoge las continuas ventajas de sostenibilidad del envase de aluminio para bebidas en comparación con los tipos de envases de la competencia.

En concreto, dicho informe actualiza varios indicadores clave de rendimiento (KPI) para 2020 y encuentra que los norteamericanos reciclan latas de aluminio a más del doble de la tasa de botellas de plástico (PET). Además, las latas de aluminio para bebidas también contienen entre 3 y 20 veces más contenido reciclado que las botellas de vidrio o PET y son mucho más valiosas como chatarra, lo que convierte al aluminio en un factor clave de la viabilidad financiera del sistema de reciclaje en los Estados Unidos. Además, debido a esta epidemia, muchas personas han probado la exquisitez de los alimentos enlatados por primera vez

El informe también presenta un nuevo KPI, la tasa de circularidad de circuito cerrado, que mide el porcentaje de material reciclado utilizado para volver al mismo producto. También muestra una modesta disminución en la tasa de reciclaje de los consumidores de latas de aluminio, con una disminución del 45,2 por ciento en 2020. A pesar de todo, la cantidad de latas de bebidas usadas (UBC) recicladas por la industria norteamericana aumentó en aproximadamente 4 mil millones de latas hasta los 46,7 mil millones de latas en 2020. El promedio en la tasa de reciclaje es de alrededor del 50 por ciento.

A tenor de estos datos, la Asociación del Aluminio respalda un esfuerzo agresivo anunciado por CMI para aumentar las tasas de reciclaje de latas de aluminio durante las próximas décadas desde los actuales niveles del 45,2 por ciento al 70 por ciento para 2030 hasta el 90 por ciento para 2050.

“Las latas de aluminio siguen siendo el envase de bebidas más reciclado y reciclable en el mercado hoy en día”, afirma Raphael Thevenin, vicepresidente de ventas y marketing de Constellium y presidente del Comité de Productores de Láminas de Latas de la Asociación de Aluminio. “Pero la tasa de reciclaje está por detrás del resto del mundo. Estos nuevos objetivos catalizarán acciones dentro y fuera de la industria para traer más latas de vuelta al flujo de reciclaje”, añade.

La tasa de circularidad de circuito cerrado mide el porcentaje de material reciclado utilizado para volver al mismo producto. Es en parte una medida de la calidad del reciclaje. Cuando los productos se reciclan, los materiales recuperados se pueden utilizar para hacer el mismo (reciclaje de circuito cerrado) o un producto diferente y, a veces, de menor calidad (reciclaje de circuito abierto). Se prefiere el reciclaje de circuito cerrado porque el producto reciclado mantiene una calidad similar a la del material primario y el proceso se puede repetir infinitamente. Por contra, el reciclaje de circuito abierto puede comprometer la calidad del material a través de un cambio en la química o un aumento de la contaminación en el nuevo producto.