El Decreto de envases ha entrado en vigor desde principios de enero, cuyo objetivo es clarificar cómo reciclar estos correctamente. Los envasadores están obligados a especificar en su etiqueta en qué contenedor debe depositarse cada envase para su correcto reciclado. También se prohíben los mensajes engañosos y de falsa publicidad verde.

Con la entrada en vigor del decreto, solo podrán incluirse en los envases mensajes del tipo “verde”, “ecológico” o “biodegradable” si realmente está respaldado y acreditado mediante pruebas específicas. De lo contrario, queda prohibido su uso. También está prohibido incorporar logotipos o símbolos de reciclaje que no se correspondan al que realmente ha usado el envase en cuestión.

El nuevo sistema es muy similar al anterior, siguiendo el criterio establecido de Ecoembes. En el contenedor amarillo hay que depositar todos los envases metálicos y bandejas de aluminio, así como tetrabricks, envases de madera (como las de fruta) y los de cerámica y bandejas de corcho blanco. Además de las botellas y envases de plástico. El azul está destinado al papel y al cartón y el verde a las botellas de vidrio. Papel con restos de alimentos y servilletas de papel usadas irán al contenedor de marrón y en algunas comunidades hay un contenedor gris donde irán residuos que no están en ninguna de las categorías mencionadas.