Desde hace meses, los expertos están haciendo sonar la alarma. La preocupación a nivel mundial ante la fuerte escasez de materias primas es cada vez mayor. Ahora le ha tocado el turno al magnesio y al aluminio que han experimentado una importante subida.

La alerta la han lanzado las asociaciones de la industria de PE de aluminio Europea, Eurofer, ACEA, Eurometaux, IndustriALL, ECCA, Estal, IMA, EUWA, EUROALLIAGES, CLEPA y metales Packaging Europe. De manera conjunta han hecho un llamamiento urgente ante el inminente riesgo de paradas de la producción en toda Europa a consecuencia de la escasez crítica en el suministro de magnesio procedente de China.

Pocos saben que el magnesio es un material de aleación clave y es ampliamente usado en la industria de producción de metales. Desde el pasado mes de septiembre, dicho suministro se ha detenido o reducido drásticamente lo que ha provocado una crisis internacional sin precedentes hasta ahora.

Aunque resulte sorprendente, la Unión Europea es casi totalmente dependiente de China en muchas materias, casi un 95% del magnesio es suministrado por el dragón rojo, las industrias europeas de producción y uso de aluminio, hierro y acero, junto con sus proveedores de materias primas, se están viendo especialmente afectadas como es el caso de la automoción, la construcción o el embalaje.

A esto hay que sumar los precios récord y desequilibrios mundiales en la cadena de suministro. Las importaciones restantes de magnesio se cotizan actualmente a precios estratosféricos, entre 10.000 a 14.000 dólares la megatonelada, en comparación con los 2.000 dólares la megatonelada a principios de este año, lo que hace que sea casi imposible para las empresas europeas producir y obtener materiales que contengan magnesio de forma viable.

WV Metalle, la asociación de comercio de metales no ferrosos de Alemania ha advertido además que Europa podría quedarse sin existencias de magnesio a finales de noviembre, lo que supondría la reducción de la producción, el cierre en cadena de empresas y la consiguiente pérdida de puestos de trabajo. Sin una acción urgente por parte de la Unión Europea, este problema, de no resolverse, amenazaría a miles de empresas en toda Europa, así como a sus cadenas de suministro y a los millones de puestos de trabajo que dependen de ellas.

Desde estas asociaciones exigen a la Comisión de la UE y a los gobiernos nacionales que trabajen de manera urgente en acciones inmediatas con sus socios chinos para mitigar el problema crítico de escasez de manera inmediata, así como los efectos de suministro a largo plazo.

En la industria, el magnesio es un componente esencial para la fabricación de hojas de aluminio o de titanio, además tiene una difícil conservación porque al cabo de tres meses da señales de oxidación. Europa importa el 45% de todo el magnesio producido en China y el 95% de lo que necesita. No hay sustitutos para el magnesio en la producción de aluminio, que también escasea, y cuyas reservas se han reducido a la mitad desde marzo.

El Viejo Continente está en una situación delicada desde el punto de vista de almacenaje y su dependencia total de China le está ya pasando factura. Las consecuencias podrían ser aún mayores si Europa no toma ya medidas urgentes.