El gobierno federal de Australia ha anunciado un alivio fiscal para los destiladores, cerveceros y productores de vino del país, que entrará en vigor el 1 de julio de 2026.
Actualmente, los cerveceros y destiladores reciben un reembolso total de los impuestos especiales pagados hasta un límite de 350.000 dólares anuales. Con la nueva medida, este límite se elevará a 400.000 dólares para todos los fabricantes de alcohol elegibles. Asimismo, la devolución del Impuesto de Igualación del Vino (WET, por sus siglas en inglés) también se incrementará a 400.000 dólares.
Alrededor de 1.500 cerveceros y destiladores, junto con 3.000 productores de vino, ya se benefician de estos incentivos fiscales.
“Nos complace haber encontrado margen en un presupuesto ajustado para ofrecer alivio fiscal a una industria clave que genera empleo y oportunidades en toda Australia”, expresó el tesorero Jim Chalmers.
Además del alivio fiscal, estos sectores contarán con el respaldo de la Comisión Australiana de Comercio e Inversión (Austrade) para potenciar sus exportaciones en mercados estratégicos. Esta iniciativa incluirá la participación en misiones comerciales, asesoramiento especializado y la oportunidad de establecer contactos para expandirse en mercados en crecimiento, como el sudeste asiático.
“Apoyar a las pequeñas destilerías, cervecerías y bodegas no solo significa fomentar la producción de productos de calidad, sino también fortalecer las economías locales y crear empleo”, destacó el ministro de Comercio y Turismo, Don Farrell.
Con el refuerzo a las exportaciones, el gobierno busca acelerar el crecimiento de estas empresas en el ámbito internacional, lo que también repercutirá en la generación de más empleo en el país.
Se estima que este paquete de alivio fiscal reducirá los ingresos fiscales en 70 millones de dólares a lo largo de cinco años, a partir del ejercicio 2024-2025.