Andernach. 06.04.2021
Desde el 1 de enero de 2021 rigen nuevas obligaciones en la Unión Europea debidas al Reglamento (UE) 2017/821 que regula el comercio de cuatro minerales: estaño, tantalio, wolframio y oro. Mediante dicho reglamento, la UE pretende impedir que el comercio de estos minerales sustente conflictos armados y trabajos forzados. Desde esta fecha, las empresas que importan los minerales enunciados a la Unión Europea se someten obligatoriamente a unos extensos procesos preventivos y de control a lo largo de la cadena de suministro.
Como uno de los mayores importadores alemanes de estaño, el fabricante de hojalata thyssenkrupp Rasselstein abraza la decisión de la UE: «El aprovisionamiento de materias primas no debe contribuir a promover los conflictos ni a violar los derechos humanos. Estamos comprometidos con la extracción y transformación responsable de estaño con la debida observancia del respeto a los fundamentos éticos. Una cadena de suministro transparente y fiable nos ayuda a alcanzar estos objetivos», ratifica Jochen Zenz, Jefe de compras materias y primas y gestión almacenes de thyssenkrupp Rasselstein GmbH. Los controles para el cumplimiento del reglamento de la UE se llevarán a cabo desde enero de 2022 por parte del órgano de control DEKSOR (Deutsche Kontrollstelle Kontrollstelle EUSorgfaltspflichten in Rohstofflieferketten) para los importadores alemanes.
Requisitos ecológicos y laborales rigurosos El estaño se utiliza para proteger la hojalata de la corrosión; por ello, es una materia prima imprescindible para garantizar la gran calidad de productos como el envase para alimentos. El revestimiento de estaño sobre la hojalata es ínfimo; por lo general se encuentra entre 1,0 g/m2 y 11,2 g/m2. Sin embargo, para que esta calidad no pese sobre las personas y el medio ambiente, thyssenkrupp Rasselstein se hace cargo de la sostenibilidad de su cadena de suministro —desde mucho antes—. Desde hace más de una década, la empresa no se abastece de estaño procedente de zonas en conflicto. «Los derechos humanos, las condiciones laborales justas, la protección del medio ambiente y la lucha contra la corrupción: estos valores no solo son de importancia en nuestro grupo de empresas,
también son válidas para nuestra cadena de suministro. En thyssenkrupp nos adherimos al Pacto Global de las Naciones Unidas. Hace ya unos años que establecimos procedimientos en nuestra empresa que nos permiten supervisar las cadenas de suministro y determinar los riesgos. Nuestras cadenas de suministro son transparentes y se someten a auditorías regulares, de modo que cubrimos plenamente las exigencias de la ley» indica Zenz. «Por cierto, Thyssenkrupp Rasselstein GmbH cumple la normativa de los Estados Unidos de América comúnmente abreviada como Dodd-Frank Act1 desde 2010, a pesar de que no estamos sometidos a la supervisión SEC ni quedamos legalmente sujetos a cumplir con estas exigencias relativas a los minerales de conflicto».
La extracción de determinadas materias primas contribuye a considerables violaciones de los derechos humanos y a la financiación de conflictos violentos en países como la República Democrática del Congo y algunos estados fronterizos. «Por ello, no compramos materias primas que financien o beneficien directa o indirectamente a grupos armados. Mantenemos un contacto estrecho con nuestros proveedores para aumentar la transparencia relativa a los productos suministrados por ellos. Aún reforzaremos la cooperación con nuestros clientes, proveedores y otros actores en el futuro para lograr mejores enfoques y soluciones factibles», afirma Zenz. «Normalmente comprobamos personalmente las condiciones locales o encargamos a terceras personas la supervisión regular de las circunstancias de nuestros proveedores».
Thyssenkrupp Rasselstein adquiere el estaño de socios consolidados en Perú, Bolivia, Brasil y Tailandia. La empresa peruana Minsur es un de principales proveedores. Desde su inicio, thyssenkrupp Rasselstein aspira a un enfoque integral en la cooperación con sus proveedores: la extracción y la transformación del estaño no solo armonizan con los derechos humanos, también están en consonancia con unas exigencias rigurosas referentes a los derechos laborales y a la ecología. Es por ello que el fabricante de hojalata ha tenido que prescindir repetidamente de empresas de su grupo de proveedores que no cumplían con sus requisitos. No solo la forma de aprovisionamiento, las exigencias también se refieren a la calidad de la materia prima en sí: el estaño que necesita thyssenkrupp Rasselstein tiene, con su 99,95 por ciento, un alto grado de pureza.
Fortalecimiento de la economía circular
Se prevén cambios en el aprovisionamiento de las materias primas: «Próximamente, queremos comezar a adquirir ciertas cantidades de estaño secundario, esto es, estaño reciclado procedente de Europa para alcanzar una cadena de suministro más sostenible y local. De esta manera ambicionamos desarrollar nuevas vías de aprovisionamiento de recursos y apoyar la economía circular local» según Zenz. El estaño se puede recuperar del lodo y de la escoria, así como de la hojalata ya galvanizada. Actualmente, el estaño obtenido por los procesos de reciclado no tiene nada que envidiar a la calidad del estaño obtenido por extracción directa y satisface las expectativas más exigentes.
Thyssenkrupp Rasselstein ya fortalece la economía circular con su acero para envases: la hojalata es un material permanente en un circuito cerrado. Debido a sus propiedades magnéticas, el acero para envases es fácil de recuperar y de reutilizar. Es reciclable en cerca de un cien por cien, casi infinitamente y sin infrarreciclaje, es decir, sin reducir su calidad, ya que conserva sus características inherentes. El acero es el material perfecto para el reciclado múltiple.
Sobre thyssenkrupp Rasselstein GmbH
thyssenkrupp Rasselstein GmbH se encuentra entre los líderes de la producción mundial de acero para envases de máxima calidad y precisión. En su ubicación de Andernach, Alemania, el mayor centro de producción de este tipo del mundo, se producen cerca de 1,5 millones de toneladas anuales de acero para envases. Nuestros 2400 empleados sirven a unos 400 clientes en multitud de mercados de 80 países, desde productores de latas para alimentos y piensos, pasando por fabricantes de latas para bebidas o aerosoles, o contenedores para productos de envasado químico-técnicos, hasta de tapones de corona y de rosca. Los equipos de expertos en servicio, distribución y asesoramiento técnico al cliente complementan la gama de productos. Trabajan en estrecha colaboración con los clientes para mantener nuestra promesa de calidad permanente y fiabilidad en todo el mundo.