La industria del envasado metálico está adoptando una tendencia creciente hacia el lightweighting o reducción del peso de las latas, impulsada por la necesidad de mejorar la sostenibilidad y la eficiencia operativa. Esta estrategia busca optimizar el uso de materiales sin comprometer la resistencia ni la funcionalidad del envase, lo que permite reducir el impacto ambiental y los costos asociados. En este sentido, el experto Roger Baker, asegura que sería imprescindible contar en cada industria con un responsable de esta área en concreto para vigilar el peso de las latas sea el adecuado.

Diversas marcas líderes están implementando esta práctica. Por ejemplo, Coca-Cola Japón ha comenzado a utilizar la lata de aluminio más ligera del mundo, desarrollada por Toyo Seikan, que pesa solo 6,1 gramos. Esta innovación permite reducir aún más las emisiones de gases de efecto invernadero durante la producción y el transporte de sus productos

Además, PepsiCo ha integrado el uso de latas de aluminio en su estrategia de envasado, reconociendo su alta reciclabilidad y contribuyendo a sus esfuerzos por reducir los residuos plásticos y mejorar la economía circular

Esta tendencia hacia el lightweighting no solo responde a las demandas de sostenibilidad, sino que también está alineada con las expectativas de los consumidores y las políticas gubernamentales que fomentan la reducción de residuos y la mejora de la reciclabilidad de los envases. Se espera que esta práctica continúe ganando terreno en la industria del envasado metálico en los próximos años.