La empresa Peak Cocktails, con sede en Ohio, ha retirado del mercado 16.128 unidades de su bebida sin alcohol Blood Orange Spritz debido a una posible sobrepresurización que podría hacer estallar las latas. El producto fue distribuido en los 50 estados y el Distrito de Columbia, incluyendo mercados clave como California, Texas y Nueva York.

El retiro, iniciado el 3 de junio de 2025, fue clasificado por la FDA como de Clase II, lo que implica posibles efectos negativos temporales o reversibles en la salud. Aunque no se han reportado incidentes, la empresa recomienda no abrir ni consumir las latas afectadas, correspondientes a los lotes B25127 y B25128, envasados los días 7 y 8 de mayo.

El problema se origina en una acumulación de presión dentro de los envases, lo que puede causar su ruptura espontánea y representar un riesgo físico para el consumidor.