PepsiCo, uno de los gigantes globales en refrescos y snacks, ha recortado su previsión anual de beneficios debido al aumento de los costes de producción y al debilitamiento del gasto del consumidor, influenciado por la incertidumbre generada por los aranceles comerciales del gobierno estadounidense.
La empresa, conocida por sus marcas icónicas como Pepsi y Frito-Lay, también registró su primera caída en beneficios trimestrales en más de cinco años. Sus acciones cayeron cerca del 2,5 % tras el anuncio. El incremento en los costes de la cadena de suministro, especialmente en materiales como el aluminio para latas de bebidas, es una de las principales preocupaciones. Según su CEO, Ramon Laguarta: “Esperamos mayor volatilidad e incertidumbre en el comercio internacional, lo que aumentará nuestros costes operativos”.
La compañía espera ahora una caída del 3% en su beneficio por acción para el año fiscal 2025, en contraste con una previsión anterior de ligero crecimiento
.