Sirvió de alimento a soldados británicos y soviéticos durante la Segunda Guerra Mundial gracias a su largo tiempo de conservación en lata.Una popularidad que se mantuvo tras la Segunda Guerra Mundial, cuando los países intentaban reconstruirse y escaseaba la comida. Décadas más tarde los Monty Python utilizaron la palabra de forma insistente, lo que la hizo realmente popular.

 

El Spam es un tipo de mezcla carne de cerdo, con azúcar, sal y patata, que resulta bastante similar al chóped. Su sabor no se puede decir que sea muy bueno y además resulta muy salado.

La empresa Hormel Foods Corporation creó la marca en 1937 para relanzar las ventas de su ‘jamón especiado’. De hecho, el nombre oficial proviene de las palabras ‘Spiced ham’.

 

Según Wikipedia, se lanzó en todo el mundo en 1957 y ganó bastante popularidad en los años 60. Incluso fue pionera a la hora de utilizar una anilla incorporada que eliminaba la necesidad de emplear un abrelatas. Aunque se fabrica en varios lugares, es especialmente popular la producción en la ciudad estadounidense Austin, Minnesota, hasta el punto de ser denominada ‘Spam Town USA’. De hecho, en esa ciudad se puede encontrar el museo Hormel Spam Museum dedicado al producto.

 

Existen otras variedades de spam como el Spam Lite que contiene una mezcla de cerdo y pollo, y existe además otra variedad que contiene sólo pavo asado permitiendo así que sea un alimento halal, es decir que no esté prohibido por el islam. Esta variedad es especialmente popular en mercados musulmanes, también existe en una variedad con bajo contenido de sal.

 

Con el paso del tiempo, este producto se convirtió en sinónimo de un ingrediente barato en Occidente, pero se vio como un ¨manjar¨ en la región de Asia-Pacífico, lo que explica en parte el éxito de la marca en los últimos años. El buen desempeño de la empresa fue destacado por Jim Snee, presidente de Hormel Foods, tras la publicación de los resultados del grupo el pasado año.

 El reciente éxito de la marca, ahora presente en más de 80 países, ha motivado a Hormel Foods a estudiar una expansión de su catálogo de productos, que debería llegar a los estantes en 2023.