Las nuevas tecnologías de fabricación de Aluminio basadas en la electricidad propiciarán la ansiada meta del residuo cero que se persigue para el año 2050, según se deduce del informe realizado por European Aluminium: Net-zero by 2050: Science Based Decarbonisation Pathways for the European Aluminium Industry”.

El objetivo es reducir las emisiones de gases efecto invernadero en un 92.4% 2050. Para alcanzarlo, se requiere un cambio hacia tecnologías impulsadas por electricidad en la fabricación de aluminio, como el refinado de alúmina y los procesos de fundición, señala el documento.

Para llegar a este punto, la industria necesita hacer una reestructuración en profundidad de nuevas instalaciones de fundición, con el elevado coste económico que ello conlleva. El gasto en I+D determinará el ritmo de descarbonización del sector.

El informe insta a los responsables a acelerar el cambio a energías más limpias, pero solicita apoyo legislativo para que este proceso resulte más asequible para los empresarios del aluminio. Por supuesto, las iniciativas de reciclaje tienen que apoyar en todo momento este objetivo de residuos cero. Esta palanca de cambio es ya una realidad en la que fabricantes, e incluso consumidores, se muestran comprometidos.

El director de European Aluminium, Paul Voss,  destaca que “Dado que el aluminio es una fuente significativa de emisiones de gases de efecto invernadero hoy en día y un material estratégico para el sector de energía limpia del mañana, las apuestas son altas y nuestra responsabilidad es clara”