La cafetera española East Crema Coffee ha decidido lanzarse de lleno a un nuevo terreno: el de las bebidas en lata. Su gran apuesta es el Cold Brew, un café infusionado en frío durante 20 horas que presume de ser suave para el estómago (gracias a su baja acidez) pero demoledor para el sueño, con una buena dosis de cafeína. La nueva línea ya se puede comprar en su web y está presente en sus 16 tiendas físicas.

Con este nuevo movimiento, la marca quiere hacerse un hueco en el mundo de las bebidas “listas para tomar” (RTD, por sus siglas en inglés), un mercado en plena efervescencia donde lo que manda es la comodidad sin sacrificar sabor ni funcionalidad. Sus latas de 330 ml, hechas con materiales reciclables, están pensadas para quienes necesitan energía real sin artificios: deportistas, gamers, currantes a mil por hora… o simplemente amantes del café con ganas de probar algo nuevo.

Alberto Velarde, fundador y CEO de East Crema Coffee asegura que el objetivo es acercar un café de mucha calidad a cualquier momento del día. Su plan de expansión incluye colocar estas nuevas bebidas en gimnasios, eventos deportivos y todos esos lugares donde la cafeína funcional es más que bienvenida. ¿Lo próximo? Dependerá de cómo responda el público, pero no se cierran puertas a nuevos canales de distribución.

Y para el verano… cafés con flow

Además del Cold Brew, East Crema ha reforzado su carta estacional con una colección que es puro verano: Signature Summer Drinks, una serie de cafés fríos con sabores originales y muy instagrameables. ¿Los protagonistas? Mount Fuji (con flor de cerezo y pistacho), Caramel Tahini Latte (caramelo y tahini), Salted Hazelnut Latte (avellana con un toque salado) y Orange Matcha (matcha ceremonial con zumo de naranja natural). Esta colección ya está disponible en todas sus cafeterías.

Con esta nueva jugada, East Crema Coffee sigue creciendo sin perder su esencia: café de especialidad con alma creativa, espíritu innovador y un firme compromiso con la sostenibilidad. Y ahora, también en lata.