La elongación de la hojalata es un factor importante en el proceso de embutición. La elongación se refiere a la capacidad del material para estirarse sin romperse. En el caso de la embutición, una hojalata con una mayor elongación permitirá una mayor deformación antes de que ocurra la fractura.
Cuando se aplica fuerza al émbolo durante el proceso de embutición, la hojalata experimenta esfuerzos y deformaciones. Si la hojalata tiene una baja elongación, es más propensa a sufrir fracturas durante el proceso de conformado. Por otro lado, una hojalata con una alta elongación puede soportar una mayor deformación sin romperse, lo que resulta en un proceso de embutición más exitoso.
Es importante tener en cuenta que la elongación de la hojalata puede verse afectada por varios factores, como la composición del material, el espesor de la hoja y el tratamiento térmico al que se ha sometido. Por lo tanto, es necesario seleccionar cuidadosamente la hojalata con la elongación adecuada para garantizar un proceso de embutición exitoso.
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