Durante un tiempo, la Guardia Civil había notado que en pequeños negocios de ciertas zonas de Terres de l’Ebre se estaban vendiendo latas de refresco de una famosa marca (Coca-Cola), las cuales solo estaban etiquetadas en alemán. Esto iba en contra de las regulaciones sobre marcado y etiquetado de productos.

Luego de realizar varias investigaciones, los agentes determinaron que las latas estaban siendo vendidas por una sola compañía distribuidora ubicada en Amposta.

El 9 de abril pasado, miembros de la Guardia Civil de Tortosa llevaron a cabo una inspección del etiquetado de los productos que esta compañía estaba vendiendo en su nave industrial.

Dentro del lugar, descubrieron una gran cantidad de paletas llenas de latas de refresco de una marca muy conocida. Todas las latas tenían etiquetas en alemán y no se utilizaban los idiomas autorizados como el castellano o catalán.

El producto estaba listo para ser vendido y utilizado por los consumidores, pero fue retenido de forma temporal. La denuncia correspondiente fue enviada a la Agencia Catalana de Consumo para su seguimiento.

Según la ley de Consumo de Cataluña, cualquier etiquetado en un idioma diferente al aprobado está en contra de las normas que rigen el marcado, etiquetado y embalaje de productos destinados a la venta. Esto va en contra del derecho de los consumidores a tener información precisa sobre los productos que adquieren.

La Guardia Civil de Tortosa continúa haciendo esfuerzos para encontrar otras entregas de productos que puedan violar las normativas de protección al consumidor, o cualquier otro reglamento en la materia.