La industria estadounidense de fabricación de latas necesita más aluminio reciclado para reducir su huella de carbono y fortalecer la resiliencia de la cadena de suministro, según el presidente del Can Manufacturers Institute (CMI).

El CMI ha establecido un objetivo ambicioso de alcanzar una tasa de reciclaje del 70% para 2030, con el fin de mejorar la circularidad de las latas de aluminio y demostrar el compromiso de la industria con la sostenibilidad.

Fabricar una lata de aluminio a partir de material reciclado reduce las emisiones de gases de efecto invernadero en más del 90% en comparación con el uso de material primario.

Además, el CMI ha destacado que el reciclaje de aluminio no solo tiene beneficios ambientales, sino que también contribuye a la creación de empleos y al fortalecimiento de la cadena de suministro nacional.

Con estos esfuerzos, la industria busca reducir su dependencia de las importaciones y garantizar un suministro más sostenible de aluminio para la fabricación de latas.