En 2024, España logró reciclar el 50,7 % de los envases de aluminio que se pusieron en el mercado, cumpliendo con un año de antelación el objetivo fijado por la Directiva Europea 2018/852, que establecía ese porcentaje como meta para 2025. En total, se recuperaron 78.297 toneladas de aluminio a través de distintos canales como plantas de selección, residuos sólidos urbanos, compostaje, recogidas selectivas y escorias de incineradora.

La cifra refleja no solo el avance en materia de gestión de residuos, sino también una mayor concienciación ciudadana respecto al reciclaje de este material. Además, se da en un contexto de incremento del consumo, ya que la cantidad de envases de aluminio puestos en el mercado ascendió a 154.455 toneladas, según la nueva metodología del Real Decreto 1055/2022 sobre envases y residuos de envases. Esta normativa ha modificado el modo de contabilizar el reciclado, excluyendo impurezas y asegurando una medición más precisa.

Perspectivas hacia 2030

Con el objetivo de alcanzar una tasa de reciclaje del 60 % en 2030, la Asociación para el Reciclado de Productos de Aluminio (ARPAL) intensificará sus esfuerzos en sensibilización y formación. La entidad trabaja en colaboración con administraciones, centros educativos y otras organizaciones para fomentar el correcto depósito de estos envases en el contenedor amarillo y promover su recuperación.

Desde su fundación en 1994, ARPAL ha llevado a cabo numerosas campañas y proyectos educativos en todo el país para impulsar el reciclaje del aluminio, un material que conserva sus propiedades indefinidamente y cuyo proceso de recuperación permite ahorrar hasta un 95 % de la energía que se requeriría para producirlo a partir de materias primas vírgenes como la bauxita.

El valor del reciclaje del aluminio

El aluminio es uno de los materiales de envase más valiosos del mercado. Su alta reciclabilidad y el hecho de que el 75 % del aluminio producido en los últimos cien años siga en uso lo convierten en un ejemplo de economía circular. A través del reciclaje, este metal se reintegra una y otra vez al ciclo productivo sin pérdida de calidad, generando importantes beneficios medioambientales y económicos.

ARPAL está respaldada por cuatro grandes compañías del sector —Aludium, Constelium, Speira GmbH y Novelis Europe— y colabora activamente con asociaciones europeas como European Aluminium y EAFA (European Aluminium Foil Association), así como con la Asociación de Latas de Bebidas en España.