El sector del aluminio en Estados Unidos está viviendo una transformación histórica con la construcción simultánea de dos gigantescas plantas de laminado que prometen reconfigurar la cadena de suministro nacional e impulsar el empleo y la innovación en el sur del país.

Por un lado, Aluminum Dynamics, filial de Steel Dynamics Inc., avanza a toda máquina en la construcción de una planta de 2,3 millones de pies cuadrados en Columbus, Misisipi, con una inversión de 2.500 millones de dólares. Esta instalación de vanguardia, que comenzará operaciones en verano de 2025, será la primera planta de su tipo construida en EE.UU. desde la Segunda Guerra Mundial. Se enfocará en transformar más de 2.000 millones de libras de chatarra de aluminio al año en productos laminados para los sectores automotriz, de envases y de construcción, dentro de un modelo plenamente circular. Además, contará con un “campus de clientes” de 1.200 acres destinado a atraer empresas aliadas al ecosistema industrial local.

Simultáneamente, Novelis Inc. también apuesta por el sur estadounidense con su propia megafábrica en Bay Minette, Alabama, otro proyecto de 2.500 millones de dólares. Se trata de la primera planta de laminado de aluminio totalmente integrada construida en EE.UU. en cuatro décadas, con una capacidad anual de producción de 600.000 toneladas métricas. Estará orientada principalmente al mercado de envases de bebidas, aunque también podrá abastecer al sector automotor. El complejo creará hasta 1.000 nuevos empleos y tiene previsto iniciar operaciones en la segunda mitad de 2025.

Ambos proyectos representan inversiones estratégicas que buscan fortalecer la independencia industrial de Estados Unidos, reducir la dependencia de importaciones, promover el reciclaje de metales y modernizar la producción con tecnología de punta. Con más de 10.000 millones de dólares invertidos en operaciones de aluminio en EE.UU. en la última década, se consolida así una auténtica “renovación del aluminio” que promete beneficios sostenibles, económicos y medioambientales para el país.

“Estas nuevas plantas son ejemplos emblemáticos de lo que la industria estadounidense del aluminio puede lograr cuando se combinan inversión, innovación y compromiso con la sostenibilidad”, afirmó un portavoz de la Aluminum Association, que respalda ambos proyectos como parte de su hoja de ruta hacia una cadena de suministro resiliente.

Ambas iniciativas están llamadas a ser referentes del resurgir industrial estadounidense y podrían marcar un antes y un después en la forma en que se produce y recicla el aluminio en Norteamérica.