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Embalaje para mercancías peligrosas: lo que debes conocer con detalle

Las mercancías peligrosas o IMO son aquellos productos que suponen un riesgo para la salud, el medio ambiente o la propiedad, como por ejemplo los líquidos inflamables, los explosivos o determinadas sustancias tóxicas. Para mantener al máximo la seguridad, el transporte de mercancías peligrosas se rige por determinadas normativas aplicables a nivel mundial. En el siguiente post os contamos con detalle la clasificación de las mercancías peligrosas.

Precisamente el transporte de mercancías peligrosas exige de un proceso de embalaje previo realizado bajo la normativa reguladora que clasifique este tipo de envase. El  rango de mercancías puede ir de las 60.000 hasta los 200.000 objetos y sustancias diferentes.  Si no se hace correctamente, el producto puede ser denegado o retenido en el lugar de destino causando pérdidas económicas para las empresas encargadas de su comercialización.

 

¿Qué entendemos por embalaje para mercancías peligrosas?

El embalaje para mercancías peligrosas es todo aquel artículo o sustancia que, cuando se transportan por vía aérea, ferroviaria o marítima, puede constituir un riesgo importante para la salud, la propiedad, la seguridad o el medio ambiente.

Puede ser clasificado como embalaje homologado para el transporte de mercancías peligrosas aquel configurado a partir de cartón, plástico o metal, siempre y cuando cumplan con los certificados de las pruebas que garanticen su resistencia y seguridad. Además, estos podrán combinarse con sistemas de embalaje primario para la protección de los productos y deberán ir correctamente etiquetados en su exterior.

Ejemplos de mercancías peligrosas que utilizamos a diario pueden ser la pintura, barniz, familiares. Esto nos puede dar una idea de la magnitud de los accidentes que puede ocasionar el transporte de mercancías peligrosas en grandes volúmenes y la importancia de los códigos reguladores relativos a los diferentes medios de transporte y en la seguridad para el medio ambiente y la vida humana.

Resulta vital realizar una correcta clasificación e identificación de los mismos ya que de no hacerlo, el expedidor o transportista no podrá realizar ninguna acción con la materia. La clasificación, seguida de la identificación de la sustancia por un nombre y un número, son vitales para seguir con el resto de trámites.

 

Sistema de la ONU

Los modos de transporte marítimo y aéreo, hasta finales de 1970, disponían de su propio sistema de clasificación independiente del de carretera y ferrocarril con muy pocas similitudes entre ellos. La ONU, haciéndose eco de este problema que existía, aprobó en 1954, a través de su Consejo Económico una resolución que establecía la creación de un Comité que redactara un conjunto de reglas normalizadas para el transporte de mercancías peligrosas válidas para todos los modos de transporte. Hoy en día se conoce como el Comité de Expertos en el transporte de mercancías peligrosas y en el sistema global de armonizado de clasificación y etiquetado.

Las mercancías peligrosas pueden presentarse en forma de materias primas, es decir, habiendo sido extraídas directamente desde un punto con la intención de ser procesadas posteriormente en el lugar de destino. También pueden presentarse en forma de productos finales, en cuyo caso, deberán transportarse desde el lugar de fabricación hasta el punto de venta; esto ocurre con las baterías de litio, o líquidos inflamables -como el combustible- entre otros.

El transporte y embalaje de todos estos productos queda prohibido, tanto nacional como internacional, a menos que cuenten con los procesos de homologación necesarios que garanticen la seguridad de la mercancía en todo momento.

A la hora de realizar el transporte de mercancías peligrosas es obligatorio que estén identificadas con una etiqueta concreta que deberá estar en un lugar visible. Esta etiqueta, en forma de rombo, incorpora el número de la clasificación realizada por la ONU. De esta manera, si nos encontramos un camión con una etiqueta en forma de rombo con el número 3, sabremos que está transportando líquidos inflamables.

En el caso terrestre, la etiqueta se pondrá en la parte trasera del vehículo y también en los laterales. En el caso del transporte por vía aérea y marítima, serán los contenedores los que deben ir marcados con dicha etiqueta.

 

Normativa reguladora del embalaje para mercancías peligrosas

Los sistemas de embalaje para mercancías peligrosas están regulados según la normativa ADR-RID, IMDG, IATA-OACI. Estos sistemas quedan referidos a la regulación del transporte de mercancías peligrosas según su vía -carretera, marítima y aérea- en el plano nacional e internacional. Así pues, conocemos que cada una de ellas hace referencia a lo siguiente:

ADR: Es el Acuerdo Europeo sobre Transporte Internacional de Mercancías Peligrosas por carretera.

RID: Es el Reglamento relativo al Transporte Internacional de Mercancías Peligrosas por ferrocarril.

IMDG: Hace referencia al Código Marítimo Internacional de Mercancías Peligrosas.

IATA: Es la Asociación Internacional de Transporte Aéreo que regula el tráfico aéreo mundial.

OACI: La Organización de Aviación Civil internacional es el órgano consultivo de las Naciones Unidas en cuanto a Aviación Civil Internacional.

 

Clasificación de las mercancías peligrosas

Según la normativa ADR, se establecen 13 categorías para clasificar las mercancías peligrosas según el tipo de producto.

Clase 1: Materias y objetos explosivos

Clase 2: Gases

Clase 3: Líquidos inflamables

Clase 4.1: Materias sólidas inflamables, materias autorreactivas y materias explosivas desensibilizadas sólidas

Clase 4.2: Materias que pueden experimentar inflamación espontánea

Clase 4.3: Materias que en contacto con el agua desprenden gases inflamables

Clase 5.1: Materias comburentes

Clase 5.2: Peróxidos orgánicos

Clase 6.1: Materias tóxicas

Clase 6.2: Materias infecciosas

Clase 7: Materias radiactivas

Clase 8: Materias corrosivas

Clase 9: Materias y objetos peligrosos diversos

 

Por otra parte, estas serán agrupadas en otros 3 conjuntos según su nivel de riesgo. Así, haremos la siguiente clasificación:

Grupo de embalaje I: Materias muy peligrosas

Grupo de embalaje II: Materias medianamente peligrosas

Grupo de embalaje III: Materias que presentan un grado menor de peligrosidad

Cabe mencionar que el nivel de riesgo variará según la peligrosidad de la mercancía y no según la clase de producto. Es decir, las materias y objetos explosivos -clase 1-, pueden ser clasificadas tanto en el grupo de embalaje I, como en el II o el III, dependiendo, por ejemplo, de si pueden producir una explosión en masa al ser transportados, en cuyo caso, serían más peligrosos.

 

Etiquetado del embalaje para mercancías peligrosas

Según los acuerdos internacional el embalaje debe ser de un tipo de diseño, certificado por una unidad nacional competente. En el exterior del embalaje destinado a la contención de mercancías peligrosas, se debe distinguir una referencia al tipo de envase utilizando, cajas 4G o cajas 4GV, por ejemplo-, sus características, peso y estado de la materia que contiene, así como el año de clasificación del contenedor. Esta información aparecerá dentro de la contraseña de homologación.

Por otro lado, el envase deberá contar con el número ONU, que identificará la materia a partir de cuatro dígitos, cada producto cuenta con un código identificador que lo vincula a su clase, etiqueta correspondiente y número identificador de peligro.

Además, las cajas homologadas deberán tener una marca de manipulación que indique la orientación del envase durante el proceso de transporte y manipulación. Finalmente, la normativa establece que, con tal de facilitar el trabajo del transportista y establecer un código de comunicación internacional que permita conocer qué producto contiene la caja, cada embalaje para mercancías peligrosas dispondrá en su exterior de un distintivo visual siguiendo este sistema de etiquetado.

 

Símbolo de embalaje

El símbolo significa que un paquete ha sido probado y superado las pruebas de rendimiento. Existen varios tipos de embalajes combinado junto a varios materiales diferentes con los que se construyen.

Tipos de embalaje:

  • Tambores/Cubos
  • Barriles
  • Jerrican
  • Caja
  • Bolsa
  • Embalaje compuesto

 

Puede haber una combinación de número y letra por ejemplo:

4D: caja de madera contrachapada

2D: barril de madera contrachapado

1 A 1 : tambor de acero con cabezal no extraíble

4GV: caja de fibra de madera variación II Embalaje.

 

Clase 1 de mercancías peligrosas: materias y objetos explosivos

Aquí se clasifican mercancías de diversa índole siempre relacionadas con el riesgo de explosión. Por ejemplo, aquí podremos encontrar fuegos artificiales, cohetes, detonadores y demás productos pirotécnicos.

 

Existe una subdivisión de materiales explosivos:

1.1. Materias y objetos con riesgo de producir una explosión en masa.

1.2. Materias y objetos con riesgo de proyección, pero no de explosión en masa.

1.3. Materias y objetos con riesgo de producir un incendio ligero, efectos de onda expansiva o de proyección, pero sin riesgo de una explosión en masa.

La etiqueta de estas tres primeras subcategorías de mercancías peligrosas cuenta con el icono de una bomba explotando y un número 1 en la parte inferior:

1.4. Materias y objetos con un pequeño riesgo de explosión en caso de arder. La explosión se restringe a los bultos y no provocan una proyección de elementos.

1.5. Materias y objetos muy poco sensibles a la explosión en masa en condiciones normales de transporte.

1.6. Objetos extremadamente poco sensibles a una explosión.

 

Las etiquetas de estas otras tres subdivisiones indican el número de cada tipo (1.4.; 1.5.; 1.6.) junto al número 1 en la parte inferior:

Clase 2 de mercancías peligrosas: gases

Los gases pueden encontrarse licuados, comprimidos o refrigerados. A su vez, se clasifican en gases asfixiantes, comburentes, inflamables o tóxicos. Hay 3 subdivisiones, aunque las etiquetas siempre incluyen el número 2 en la parte inferior:

 

2.1. Gases inflamables al contacto con el calor; por ejemplo el butano. La etiqueta muestra el símbolo de una llama (negra o blanca) sobre color rojo.

2.2. Gases no inflamables, no tóxicos. Producen asfixia al sustituir al oxígeno y, además, tienen características comburentes (favorecen la combustión más que el aire normal). Por ejemplo, mencionamos al helio.

La etiqueta se compone de una bombona en color negro o blanco sobre verde.

2.3. Gases tóxicos. Respirarlos puede provocar graves daños o incluso llegar a matar. Además, pueden favorecer la combustión, ser inflamables y corrosivos. Un ejemplo de gas de este tipo es el cloro.

 

Clase 3 de mercancías peligrosas: materias líquidas inflamables

Esta clase engloba los líquidos inflamables y explosivos líquidos insensibles, como por ejemplo la gasolina, aguarrás o pintura. La etiqueta comparte el símbolo de la llama, pero se distingue de la clase 2 por incorporar el número 3 en el ángulo inferior.

 

 Clase 4 de mercancías peligrosas: sólidos inflamables, sustancias que pueden sufrir combustión espontánea, sustancias que en contacto con el agua pueden inflamarse.

 

Existen tres subcategorías, aunque en las etiquetas siempre debe aparecer el número 4:

4.1. Sólidos inflamables: se trata de sólidos que en condiciones normales de transporte son inflamables y la fricción puede desencadenar incendios.

La etiqueta lleva el símbolo de la llama en color negro sobre un fondo de franjas rojas y blancas verticales.

4.2. Sustancias que pueden sufrir combustión espontánea al calentarse en contacto con el aire o durante el transporte. Como ejemplo podemos mencionar el carbón.

En este caso, la etiqueta está dividida en fondo blanco en la mitad superior y fondo rojo en la inferior. Muestra una llama de color negro sobre blanco.

 

Etiqueta mercancías peligrosas clase 4.2. Sustancias que pueden sufrir combustión espontánea

4.3. Sustancias que en contacto con el agua pueden inflamarse como por ejemplo el sodio o el potasio. La etiqueta difiere de las anteriores en que tiene el fondo azul.

  1. Clase 5 de mercancías peligrosas: sustancias comburentes y peróxidos orgánicos

En este caso hay dos subcategorías:

 

5.1. Sustancias comburentes

Estos líquidos o sólidos favorecen la combustión, por lo que el contacto con otros materiales puede desembocar en incendios.

 

La etiqueta asociada porta el símbolo de la llama sobre un círculo. El color de fondo es amarillo y lleva el número 5.1 en la parte inferior.

5.2. Peróxidos orgánicos

Son derivados del peróxido de hidrógeno. Estas sustancias son extremadamente peligrosas y solo se pueden incluir ciertas cantidades en una unidad de carga.

 

La etiqueta que deben llevar exhibe una llama blanca o negra sobre el fondo mitad color rojo y amarillo. Le corresponde el número 5.2.

Clase 6 de mercancías peligrosas: materias tóxicas e infecciosas

6.1. Sustancias tóxicas

Pueden provocar la muerte al ser ingeridas, al entrar en contacto con la piel o al ser inhaladas.

La etiqueta enseña el símbolo de la calavera en color negro sobre blanco. Lleva el número 6.

 

Etiqueta mercancías peligrosas clase 6 Sustancias tóxicas

6.2. Sustancias infecciosas

En este caso, la mercancía peligrosa contiene microorganismos que pueden causar enfermedades. La etiqueta debe contener el símbolo de tres lunas superpuestas sobre un círculo en negro y fondo blanco. Además, tienen el mensaje de que son “sustancias infecciosas” y el aviso de que “en caso de daño, derrame o fuga, es necesario avisar a las autoridades sanitarias”.

Clase 7 de mercancías peligrosas: sustancias radioactivas

Estas mercancías peligrosas tienen elementos radiactivos como el uranio o plutonio. Existen tres categorías de este tipo dependiendo de su nivel de radiación y una dedicada al material fisionable.

Las etiquetas de las tres primeras categorías ( I, II y III) muestran el símbolo de trébol radiactivo y muestran los datos respecto al contenido, cantidad y actividad a la que se destinan.

La categoría II y III indican una mayor peligrosidad y comparten el color amarillo de fondo en la mitad superior.

Etiqueta mercancías peligrosas clase 7 elementos radiactivos I, II, III

La etiqueta del material fisionable es blanca y debe incluir la leyenda: “fisionable” en color negro. En la parte inferior tiene que mostrar el “Índice de Cuidado Crítico” y el número 7.

Clase 8 de mercancías peligrosas: sustancias corrosivas

Este tipo de materias dañan la piel al entrar en contacto con ellas. También pueden producir envenenamiento por inhalación o ingestión. Un ejemplo lo encontramos en sustancias como  el ácido sulfúrico o el hipoclorito sódico.

La etiqueta cuenta con el símbolo de dos tubos de ensayo vertiendo su contenido sobre una superficie y sobre una mano. El fondo de la parte superior es blanco frente a la figura en negro. La parte inferior es de color negro y tiene la palabra “corrosivo” y el número 8.

Clase 9 de mercancías peligrosas: sustancias que presentan peligros diversos

Estas materias presentan algún tipo de riesgo que no está incluido en los anteriores apartados. Aquí se incluye por ejemplo el hielo seco que se utiliza para refrigerar distintos productos.

 

La etiqueta de este apartado presenta franjas verticales en blanco y negro en la mitad superior y, en la inferior, figura el número 9 sobre un fondo blanco.

Para finalizar, tenemos que mencionar que todas estas etiquetas deben contar con forma de rombo y unas dimensiones de cómo mínimo 100 x 100 mm.

 

Consecuencias de un etiquetado o embalaje incorrecto

La importancia del etiquetado de este tipo de productos es vital ya que puede suponer la denegación de entrada de la mercancía, así como una sanción adicional que incrementará las mermas adicionales a la prohibición o decomisión del artículo. Es por ello que resulta vital que el producto a transportar cuente con una correcta clasificación y etiquetado al igual que la información del mismo aparezca en una zona visible del embalaje.

También durante la paletización de la caja se debe extremar las medidas de manipulación y conservación, escogiendo un tipo de palet con cuatro entradas, que no se sobrecarga y repartiendo la carga uniformemente en pilas correctamente estructuradas y protegidas por un film.

Por último, es importante que las cajas que contengan el producto estén en perfecto estado y no dejen espacio libre entre el producto y las paredes laterales del embalaje. Será vital acondicionar la caja en su interior para cumplir con todas las garantías, ya sea con interiores rígidos, flexibles o vermiculita para separar los artículos en el caso de que haya varias unidades o simplemente, garantizar la sujeción de los mismos a fin de evitar derrames, que podrían causar daños a los operarios y al entorno.

 

 

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